Esta increíble historia sucedió en Odessa, Ucrania.
Después de comprar la antigua casa, los nuevos propietarios comenzaron a renovarla. Tiraron casi todos los muebles viejos, a excepción de sillas y una mecedora vintage, ya que planeaban utilizar estas sillas para obras de renovación. A sus hijos les gustó mucho la mecedora y decidieron conservarla también.
Después de un tiempo se quedaron sin dinero y hubo que detener las reparaciones. Como suele ocurrir en situaciones así, la gente tuvo que vivir literalmente con maletas. Reforma sin terminar y mobiliario mínimo en el apartamento. En tal situación, hay que valorar las cosas que se tienen y tratarlas con más cuidado. Al fin y al cabo, si se rompen las últimas sillas, simplemente no habrá dinero para comprar otras nuevas.
Eso es lo que le pasó a la mecedora. Los niños montaron en él todo el día y, por supuesto, lo rompieron. El jefe de familia no tuvo más remedio que intentar arreglarlo él mismo.
Y cuál fue su sorpresa cuando giró la silla y vio 12 frases en inglés grabadas en la madera de la parte trasera.
Esa misma noche, él y su amigo, que entiende de criptomonedas, pudieron restaurar el acceso a una billetera desconocida que contenía más de 10 bitcoins desde 2016. El propietario desconocido gastó alrededor de 4.000 dólares ese año lejano, comprándolas a 400 dólares cada moneda.
Al principio, los nuevos millonarios se asustaron ante tal hallazgo y decidieron ponerse en contacto con los antiguos propietarios del apartamento. Ellos, a su vez, dijeron que sabían de las extrañas frases en la mecedora, pero no entendían lo que significaban. Compraron esta silla hace 5 años en un mercado de pulgas.
Se desconoce cómo terminó esta historia. No se informó si compartieron las "ganancias".
Pero una cosa está clara: si los antiguos propietarios supieran lo que significan las 12 frases, lo más probable es que hubieran vendido esos 10 bitcoins a un ritmo de 8.000 por moneda. Esto es exactamente lo que costaba el precio de Bitcoin en su mínimo de 2019.